Es bastante común en una empresa contar con colaboradores que no tienen tan buena actitud que digamos, y siempre es un martirio para los líderes de la organización lidiar con el problema, sin embargo olvidamos a veces que todo problema tiene solución, solo tenemos que detectarlo y crear una estrategia efectiva para atacarlo.
A continuación te hablo un poco sobre las 5 actitudes que no permiten que tu equipo logre los objetivos planteados y cómo puedes solucionarlo.
1. El asesino silencioso. La falta de confianza
Esto es lo más peligroso que puede pasar en un equipo de trabajo, puede convertir el ambiente laboral en un infierno y es la forma más rápida para no lograr los resultados deseados. Si existe confianza en el equipo de trabajo se crea un espacio libre donde puedes proponer o sugerir algo para la mejora continua, preguntar sobre dudas o incluso cometer errores sin miedo de alguna consecuencia negativa. Cuando el equipo trabaja en un espacio libre de miedos existe una mayor colaboración y por ende se obtendrán mejores resultados.
2. El Estancador. El temor a tener conflicto.
El temor al conflicto impide que las mejores habilidades del equipo salgan a la luz, y por ende que el trabajo se estanque y no se obtengan mejores resultados. Es muy común pensar que el conflicto es solamente algo negativo, sin embargo, no se podría estar más equivocado. Muchas veces crear conflicto ayuda a ver otros puntos de vista, dialogar y discutir sobre las mejores soluciones. Es imposible estar de acuerdo en todo en un equipo, y al crear una discusión profesional se pueden llegar a acuerdos o conclusiones mucho mejores que las propuestas originalmente.
3. El Infiel. La falta de compromiso.
Este es un problema bastante habitual, ya que muchas veces el equipo no se siente comprometido con el objetivo o incluso con la empresa, debido a una falta de integración y de participación de todos los miembros. Este puede llegar a ser un problema bastante serio ya que si el equipo no está comprometido nunca se lograrán exitosamente los resultados.
4. El Ermitaño. La falta de interés por los resultados.
En algunas ocasiones se puede detectar a una persona que se conforma con saber que la parte que le toco está bien hecha, sin mostrar mayor interés en el resultado final que se debía obtener o si alguno de sus compañeros necesitaba algún tipo de apoyo para desatorar un problema. Esta actitud no fomenta el trabajo en equipo y no ayuda a mejorar los proyectos ni a obtener los resultados.
5. El Escapista. No asume la responsabilidad.
Es importante tener una claridad en las responsabilidades correspondientes para cada miembro del equipo, tanto para un mejor desempeño individual como para una mejor colaboración. El tener responsabilidades claras otorga cierto poder a cada miembro para tomar control de algunas situaciones que puedan surgir y buscar obtener los mejores resultados. Si uno de los miembros del equipo adopta una actitud de nunca tener la responsabilidad de nada que haya salido mal puede contaminar la dinámica del equipo y terminar creando un ambiente de desconfianza e inseguridad. Estos comportamientos son fácilmente detectables con frases como “yo no sabía”, “no me tocaba a mí”, “no me dijeron” entre otras muy comunes.
ACCIONES A TOMAR PARA RESOLVER EL PROBLEMA
Es muy importante detectar y resolver rápidamente los problemas para tener un equipo colaborativo, eficiente y productivo que logre los resultados propuestos en el tiempo establecido. Algunas de las acciones que puedes tomar en consideración son las siguientes:
- Crear espacios o juntas donde se platique sobre los proyectos u objetivos a lograr.
- Crear dinámicas de integración donde los participantes debatan sobre ciertos temas o decisiones a tomar.
- Llevar minutas sobre las juntas que se lleven para tener registro de las acciones a realizar y los compromisos de cada miembro del equipo.
- Motivar y dar seguimiento al equipo durante el proceso para ver en que están atorados y como se les puede ayudar.
- Celebrar y reconocer al equipo por los logros que se obtengan.
Hay que recordar que el hecho de que algo sea común y recurrente no quiere decir que sea normal y que siempre será así, podemos trabajar con diferentes estrategias que nos ayuden a generar un ambiente donde los colaboradores de nuestra empresa participen y trabajen comprometidamente. No es algo fácil que pasa de la noche a la mañana, pero es algo necesario si queremos alcanzar el máximo potencial en nuestra industria, y más importante, es algo posible.
En la empresa donde colaboro actualmente, hemos creamos un programa que combina las técnicas planeación estratégica, la ejecución consciente y el endomarketing para generar un ambiente donde los colaboradores tengan un sentido de pertenencia y compromiso hacia la empresa, mejorando la dinámica de trabajo y aumentando la productividad. Si te interesa conocer más información mándame un mensaje y platicamos sobre cómo podemos ayudarte.
¿Cuáles son los problemas de personal más recurrentes en tu organización? ¿Cómo los has podido solucionar? Platícame en los comentarios.
Basado en las 5 disfunciones de un equipo por Patrick Lencioni. Escrito para Kairos.lat
Esta genial el articulo. Un cordial saludo.